No sé si pasará en todos los sitios igual, pero estos muchachos de hoy en día no se fijan en nada. Copian un texto y cometen un montón de faltas de ortografía, y aunque lo repasen sigue habiendo errores.
Tradicionalmene se ha trabajado las faltas de ortografía mediante los dictados, es decir, el profesor dicta, el alumno o alumna escribe, y el profesor corrige lo hecho por el alumno. Pues bien, propongo otro método, más largo pero más efectivo a la hora de trabajar la atención con nuestros alumnos.
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Los alumnos leen el dictado que van a hacer con mucha atención, fijándose en todas las faltas ortográficas que puedan cometer.
- Cierran los libros.
- El profesor dicta.
- Los alumnos vuelven a abrir los libros y revisan su dictado. Aunque parezca mentira, aún revisándolos, siguen cometiendo fallos.
- Los alumnos se intercambian los cuadernos entre ellos y se corrigen unos a otros utilizando el libro.
- El profesor corrige los dictados y comprueba que no queden errores sin corregir.
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